Libros: Un lugar de encuentro con Joréate.

¿Sabíais que hay una localidad aragonesa llamada Libros? ¿Y que ésta se encuentra en la provincia de Teruel?

Con un lugar llamado así, y más estando en nuestra comunidad, la Biblioteca Monkayista tenía que hacer por necesidad una entrada sobre este municipio. No podíamos dejar pasar la oportunidad de descubrir un pueblo con un nombre tan bonito y animar a hacer alguna excursión por esa zona... Y para ello se nos ocurrió pedir ayuda a Chorche, el dragón-guía de Joréate por Aragón, que accedió encantado a prepararnos esta crónica especialmente para nosotros.

Una colaboración que agradecemos enormemente y que nos sirve como "hermanamiento" con una de las páginas más completas que podemos encontrar en internet sobre rutas por Aragón: www.joreate.com

Ahí va en exclusiva para nuestro blog. ¡Muchísmas gracias, Chorche!

 LIBROS

"Según la RAE el sustantivo “libro” hace referencia a un conjunto de muchas hojas de papel encuadernadas que forman un volumen. Y también una obra científica o literaria de suficiente extensión como para formar un volumen que tradicionalmente es impresa. Pero si hablamos de un nombre propio en Aragón contamos con el pueblo de “Libros”, situado en la provincia de Teruel, concretamente en la vega del Turia.

En cuanto a su historia, Libros estuvo ligada desde el siglo XII a Villel, una población cercana de la cual fue aldea. En 1180 Alfonso II de Aragón dona estos territorios a Marín Pérez, convirtiéndose en el tenente de estos territorios limítrofes con la zona ocupada por los musulmanes. En 1187 cede Villel y sus términos a la Orden de Monte Gaudio, también conocida por la Orden de Alfambra, que tenía la sede en dicha población turolense. Y en 1196 se incorporaron estas tierras a la Orden Templaria, creándose Encomienda Templaria de Villel. Precisamente una de las primeras referencias documentales data de este año, cuando se menciona el traspaso del castillo de Libros de la orden religiosa a los templarios. En el año 1212 se otorga la carta de población a Libros. Se ofrecía a los nuevos pobladores el arrendamiento de un lote de tierra a cambio de la entrega de décimas y primicias. El objetivo era repoblar y proteger el territorio, a la vez que se hacían productivas estas tierras. En ese momento Pedro II de Aragón ya había reconquistado las tierras de Ademuz, alejando de Libros la primera línea de frontera con los musulmanes. En el año 1312 se disuelve la orden templaria y se incorpora a la Orden del Hospital, dentro de la Castellanía de Amposta. 

El río Turia a su paso por Libros

 Libros se asienta en el valle del río Turia. Una fértil vega surcada por un río que discurre pausado en dirección a tierras valencianas. El casco urbano se encuentra en su margen derecha escoltado por grandes formaciones rocosas. La carretera se conoce como paseo del Turia. Las casas alineadas miran al cauce del río, escoltado por chopos de gran porte. Desde el paseo se accede directamente a la plaza donde se alza la iglesia de San Juan Bautista. Se trata de una construcción neoclásica del siglo XIX. Destaca la torre formada por cuatro cuerpos, siendo los dos superiores octogonales culminados con chapitel. En la visita a la localidad no puede faltar el mirador acondicionado recientemente desde la peña del Mortero, donde estuvo la fortaleza defensiva. Desde la travesía se toma la calle Solana, la cual rodea al promontorio rocoso situado justo encima del casco urbano. Una senda, acompañada de escaleras permite el ascenso rápido hasta la parte alta, desde donde las vistas en todas las direcciones son espectaculares. Desde este punto se aprecia cómo las viviendas aparecen encajonadas entre los peñascos y el río Turia. Ahora apenas queda nada del antiguo castillo de Libros. En realidad se trataba de un baluarte defensivo de pequeñas dimensiones y planta irregular, adaptado al terreno. Tras su intensa labor militar marcada por su carácter limítrofe, primero con musulmanes y después con castellanos, a partir del siglo XV con la unión dinástica entre Aragón y Castilla pierde su razón de ser y comienza su abandono.

Iglesia de San Juan Bautista

Peña del Mortero

También es agradable un paseo por la margen izquierda. Desde la carretera, una pasarela peatonal atraviesa el cauce. Allí se emplaza el frontón y las piscinas, además de un pequeño parque. Pero tampoco falta una terraza en una frondosa zona de sombra ideal para la época estival. Y el resto del espacio es ocupado por las huertas que ocupan el resto del valle, delimitado de nuevo por peñascos. A sus pies se emplaza la sencilla ermita del Pilar. Se trata de una capilla de reciente factura, en un entorno recoleto.


Sin salir del término municipal no se de puede dejar de visitar el antiguo barrio minero de Libros. Para ello es necesario dejar el valle del Turia y coger la carretera que conduce a Riodeva. El paisaje cambia por completo. A unos cuatro kilómetros de la carretera nacional se alcanza el desvío que conduce al antiguo asentamiento. La explotación minera de azufre se remonta a finales del siglo XVIII, y de manera intermitente se mantuvo hasta 1889. En 1906 se encarga de las minas la Industrial Química de Zaragoza. La actividad se mantuvo hasta 1956. En el momento de máximo apogeo llegaron a vivir unas dos mil personas en el poblado. Había alojamiento en pabellones de viviendas, pero también en más de un centenar de cuevas en las inmediaciones. De los edificios con los que contó el barrio, no quedan sino restos, ya que fueron derruidos tras abandonarse. Contó con cuartel de la Guardia Civil, hospital, casas de directivos, carnicería, panadería, economato, tascas, etc. El único que se mantiene en pie es la ermita de Santa Bárbara, con fachada que cuenta con arco de medio punto y espadaña a modo de templete cubierto. El interior se aloja en la roca. Respecto a las cuevas, una docena de ellas han sido rehabilitadas con Julián Martínez, vecino de Torrebaja y apodado el francés. Se encuentran abiertas y cuentan con mobiliario, lo que permite hacerse la idea de cómo eran estas viviendas. Se trata de una de las curiosidades con complementa la visita al pueblo de Libros. Un pueblo turolense, lugar de paso a tierras valencianas, que bien merece un alto en el camino. 

Y si te quedas con ganas de conocer algo más en la zona, en Joréate por Aragón te ofrecemos la posibilidad de pasar un fin de semana en el entorno, descubriendo dos rincones naturales de gran belleza, el Barranco de los Trancos en Villel y Los Amanederos en Riodeva. Este último lugar además fue habitado por el mayor dinosaurio de Europa"

Riodeva y Villel, la tierra del gigante europeo



Recordad que en nuestra biblioteca, con el código de color "naranja", podéis encontrar mapas, guías y muchísima información para que podáis seguir descubriendo más lugares de nuestra geografía aragonesa (ver catálogo) y con la web de Joreate por Aragón complementarla con sus crónicas, rutas, sugerencias y galería fotográfica.

Algunos de los ejemplares disponibles en nuestra Biblioteca

Esperamos que Libros haya sido un excelente lugar de encuentro con Joréate y que esto haya servido además para que podamos organizar más colaboraciones, excursiones y jornadas de convivencia entre sus seguidores y nuestr@s Monkayistas.

Muchísimas gracias de nuevo, Chorche. Sabemos que detrás de este simpático "guía-dragón" hay mucho trabajo, mucha ilusión y muchas ganas de compartir el amor por Aragón, sus tierras y sus gentes.

Chorche, guía de Joréate por Aragón